Si eres uno de esos afortunados que tienes los pulmones de Louis Armstrong, esta boquilla sacará el mejor sonido de tu trompeta. Es muy cómoda, grande y honda, pero como contraprestación necesita de mucho aire para hacerla sonar bien.
Personalmente, uso este tipo de boquillas tan grandes para calentar antes de tocar. Te obligan a forzar un poco los pulmones y los labios y así al cambiar a una boquilla más pequeña (3C ó 7C) te resulta mucho más fácil.
También es bastante interesante practicar agudos con la 1C. Te sientes un completo inútil pero es una muy buena manera de mejorar en resistencia y capacidad pulmonar.
Respecto a la calidad de fabricación, nada que comentar. Como todas las boquillas Bach, sin ningún problema.