Están bien, aunque son un poco "blandas" a la hora de tocar (lógicamente, no me esperaba que fueran igual que unas de madera).
Una pequeña decepción: encienden siempre que golpeas, no hay ningún interruptor on/off ni ningún control de modos (de hecho habrán venido encendiéndose durante el camino dentro de la caja, y lo seguirán haciendo siempre que las mueva).
Eso sí, dan espectáculo, que es de lo que se trata :)