Luego de buscar INTENSAMENTE durante meses distintas opciones de acústica me decanté porque esta guitarra, y fue la mejor decisión que podría haber tomado. Probé algunas Epiphone, desde líneas normales hasta las Masterbilt, unas Fender que me decepcionaron un poco (las sentí un tanto apagadas), unas Taylor (que son muy pero muy buenas) y hasta una Martin (aclaro: modelo de entrada, la verdad esperaba otra cosa de semejante marca) y nada me convencía plenamente, hasta que tuve esta guitarra en mis manos. La guitarra salió perfecta de su funda, afinada, ajustada al detalle y lista para tocar. Las terminaciones son suaves, los trastes encajados correctamente y es sólo sentirla entre las manos para darse cuenta uno que tiene un instrumento profesional de excelente calidad. L aguitarra es muy cómoda para tocar, liviana y tiene un tono hermoso; la tapa arqueada proyecta el sonido de una manera muy cálida, y los graves a la hora de tocar blues o algo de hard rock son hermosos, muy definidos y con ese timbre y brillo que podes encontrar en cualquier guitarra norteamericana a un precio que es de no creer. Conectarla a un amplificador lleva la guitarra a otro nivel (la estuve usando con mi Mustang GT y debo decir que me impresionó tanto en clean como con algunos efectos). La funda que viene con la guitarra es buena, realmente esperaba algo de menor calidad, pero para un transporte no muy atropellado sé que va a ir perfectamente resguardada.
Algo a resaltar es el embalaje de Thomann y todo el servicio y atención en general dado.
Tantos meses de espera valieron la pena. Una guitarra para toda la vida. ¡Buen trabajo, Guild!