Por su reducido tamaño y su escaso peso, hacen del Mark bass traveller el compañero perfecto para tus actuaciones, todo ello sin perder las prestaciones de otras pantallas aparentemente de mejor calidad.
Su sonido es limpio, sin ruidos con controlador del volumen del twitter y con 400W de potencia más que de sobra para tocar en locales. En mi caso lo combino con el cabezal Mark bass little Mark y me parecen los compañeros perfectos. En exteriores lo utilizo como monitor para escucharme.
Los materiales son estupendos y la fabricación robusta, combinado con su bajo peso y su reducido tamaño es perfecto para viajar con él.
La única pega que le pongo es que lo he probado con un pedal wah y otro autowah y no me acaba de gustar como lo reproduce. Con otro tipo de efectos no lo he probado.
En definitiva, me parece una pantalla buenísima con un solnido y fabricación excelente y con un precio inferior a otras pantallas de más renombre no tiene que envidiar nada ninguna otra marca. Es polivalente en diversas situaciones y me parece el perfecto para viajar. Esta compra no te arrepentirá si buscas una pantalla para lugares pequeños o como monitor.