Después de haber probado muchos pedales de reverb y haberme siempre llevado una decepción tras otra, finalmente encontré esta joya (casi) desconocida!
Resumiendo, hay tres problemas principales con los reverbs en pedal para nosotros guitarristas:
1) Son demasiado predominantes (como pasa por ejemplo con el EHX Holy Grail Neo, que también al mínimo es muy muy "wet")
2) Se comen nuestro tono (sobre todo el ataque) que tanto luchamos y trabajamos para conseguir.
3) Tienen muchas modalidades (room, hall, church, spring…) pero ninguna parece nunca ser la perfecta.
Este pedal lo soluciona todo de forma conceptualmente sencilla.
Los primeros dos problemas son casi siempre debidos a la conversión analógico/digital/analógico de la señal limpia de nuestro sonido. Lo que hace este pedal es no convertir en absoluto la señal de entrada. Es decir, solo procesa digitalmente el efecto, dejando la señal analógica original intacta y con ella todo el tono y el ataque.
El tercer problema tiene a que ver con el hecho de que la mayoría de pedales quieran hacerlo todo pero no destaquen en nada. Este tiene solo UN sonido, que es el que buscan el 99% de los guitarristas en un reverb: una mezcla entre todas esas modalidades mencionadas antes, un reverb muy natural.
La única pega es que la toma de entrada está demasiado cerca de la entrada de alimentación y es imposible conectar un alimentador y un conector acodado ancho como los Hicon por ejemplo. Entiendo que la decisión fue necesaria para permitir el alojamiento de una batería en el pedal, pero 2mm más allá me habrían gustado más. Nada del otro mundo, solo hace falta emplear otro tipo de conector menos ancho.
Total que este pedal es el primer reverb que se queda en mi pedalera después de una búsqueda de 15 años!