Los condensadores de pequeño diafragma son una necesidad para cualquier estudio, incluso los más pequeños. Siempre que necesites un sonido detallado y transparente, un condensador de pequeño diafragma debería ser tu primera opción. Para conseguir la máxima versatilidad, hazte con un set estéreo. Las cápsulas intercambiables son agradables y útiles, pero si no te llega el presupuesto, con los cardioides no tendrás ningún problema en la mayoría de las aplicaciones. Si a menudo grabas fuentes relativamente silenciosas, asegúrate de que la cifra de ruido propio no sea superior a 20 dB-A. Otros datos técnicos rara vez son un problema. La sensibilidad es generalmente bastante alta en cualquier micrófono de condensador, el SPL máximo no es un problema en aplicaciones domésticas. Extras como un atenuador pad, interruptores de filtro paso alto y accesorios tales como suspensiones elásticas, no son esenciales, pero en muchas aplicaciones te harán el trabajo más cómodo.