6. ¡Un baño juntos ya sería demasiado!

Para ambos instrumentos naturalmente rige un mismo principio: ¡El cuidado lo es todo! Lo ideal sería una limpieza después de cada uso. Pero esto no significa que haya que desmontar por completo el instrumento cada vez que se toca. En cualquier caso lo que siempre habría que hacer es limpiar la boquilla después de cada uso. Para ello los músicos tienen a disposición cepillos para boquillas y varillas de limpieza.

Utensilios de limpieza

Pero seguramente queden músicos que tras años y años tocando todavía hoy aún no lo sepan. En general se trata de reducir la humedad en todo el instrumento antes de guardarlo en su caja. Las historias de horror acerca de los efectos de la humedad en los estuches y maletines son aquí el tema a evitar absolutamente.

¿Pero cómo eliminamos la humedad?

Para ello ayudan en primer término las llaves de desagüe, que a menudo se deben dejar actuar ya mientras se toca el instrumento. Por medio de los paños de limpieza y compañía se retira el resto de humedad acumulada después de tocar. Pero siempre queda un remanente de humedad y, como la saliva no es agua destilada, quedan también restos ácidos en el instrumento que actúan desde el interior. Para evitarlo, es recomendable un baño en agua tibia cada dos semanas o dos meses según la frecuencia de uso.

Se entiende que el baño es para el instrumento no para el músico ;-). Ambos instrumentos deslumbran por su atractivo brillo exterior, por eso habría que preocuparse después de haber estado tocando de que el brillo permanezca. Con un paño suave se pueden eliminar tanto las huellas dactilares como las manchas de humedad. Existen productos especiales que protegen y devuelven el brillo de antaño a los instrumentos un poco dejados. ¡Pero bañar y limpiar no lo es todo!

También los pistones necesitan cuidados. Esto significa enaceitarlos con regularidad, porque si no el mecanismo no funcionará a la perfección. Se recomienda consultar con un establecimiento musical especializado para saber qué aceites y grasas son más recomendables. Lo cierto es que quien desee disfrutar por mucho tiempo de su instrumento, no debería ahorrar en productos y accesorios para su cuidado.