El asiento es muy elegante, lo único es que me parece que cuesta un poco más de la cuenta subirlo y bajarlo. Después de un rato haciéndolo se puede subir y bajar con algo más de facilidad, pero es como si le faltase algo de lubricación. En cualquier caso no le he dado mucha importancia, porque una vez que lo he puesto a mi altura, ya tampoco lo voy a subir ni bajar. Es fácil de montar, pero hay que asegurarse bien de que está apretado a tope, porque después de terminar, pensaba que ya estaba y al sentarme hubo un par de patas que empezaban a moverse un poco. Las volví a apretar con más esmero y de momento no he vuelto a tener problemas.