Llevo dos años usando el Arturia Keystep 32 keys, un controlador compacto con teclado de 32 teclas sensibles a la velocidad y aftertouch, que incluye arpegiador, secuenciador polifónico de hasta 64 pasos con 8 notas por paso, tiras táctiles de pitch/mod y salidas CV, MIDI y DIN sync . Es un cacharro super completito para estudio y directo, ¡y en resumen mi opinión general es que es un gadget que cumple al 100 % y conecta con todo mi setup!
En mi uso personal valoro muchísimo la funcionalidad tan completa que trae: grabo secuencias por MIDI, disparo arpegios al vuelo, cambio octavas sin pensar y los controles sensoriales tactiles hacen que jugar con las modulaciones sea intuitivo. Además, al integrarlo con mi DAW se lleva mejor que con mis otros controladores; responden a la perfección los parámetros y la sincronización, ya sea por USB o CV con sintetizadores modulares. Y las teclas, pese a ser reducidas, tienen buena respuesta al tacto y aftertouch, lo que para mis sesiones es más que suficiente.
De lo que menos me gusta es que no incluye tapa, así que toca comprarla aparte si lo quieres proteger en tu mesa. Tampoco se alimenta con pilas (ojalá fuera autónomo total), y aunque el USB es suficiente para estudio, no trae fuente de alimentación, así que para tocar fuera necesitas un adaptador. Pequeños detalles que no empañan el resultado, pero ahí están.
En resumen, después de dos años con él, puedo decir que es un controlador robusto y súper práctico, con muchas funciones útiles y una integración brutal, quizá peque en detalles como accesorios incluidos y alimentación, pero a cambio me ha hecho la vida musical mucho más sencilla.