Después de un año y medio de uso diario, puedo decir que se han convertido en mi referencia absoluta para producir, mezclar e incluso escuchar música. Tardé un tiempo en acostumbrarme a ellos, de hecho notaba que la música estaba demasiado cruda, desnuda y con falta de brillo, por otra parte podia apreciar muchas texturas que antes desconocía en canciones conocidas y mis propias producciones. Esta sensación desaparece cuando tu oído se acostumbra a ellos, desde luego he mejorado muchísimo en mis mezclas, lo recomiendo sin dudar, he de resaltar que a pesar de su aparente constucción de plástico, tienen una calidad bastante robusta, se me han caído por lo menos 100 veces, tirones de cable, etc.. (soy bastante manazas) y siguen intactos como el primer día. Creo que ha sido de las mejores inversiones que he hecho en la música a un precio de chiste.