Existen numerosos clones del clásico 1176, y el fabricante estadounidense Black Lion Audio también cuenta con su propia versión: el Seventeen, un compresor/limitador FET inspirado en ese icónico modelo. Sin embargo, el Bluey se basa en un 1176 muy particular: el compresor vocal preferido del legendario ingeniero de mezcla Chris Lord-Alge, una de las primeras versiones Blue Stripe modificadas en múltiples aspectos. Mientras la mayoría de los compresores inspirados en el 1176 parten del diseño Black Face, el Bluey de Black Lion Audio se distingue por seguir una referencia única. Además, incorpora funciones poco comunes en este tipo de equipos, como el control Wet/Dry para mezclar la señal comprimida con la original y la conexión Link para operar en estéreo. Su precio lo ubica en el segmento superior, pero lo justifica con una calidad de construcción sobresaliente y una fidelidad excepcional al legendario modelo que lo inspiró.
El Black Lion Audio Bluey destaca por ofrecer todas las virtudes propias de un compresor FET, junto con las cualidades que han hecho del 1176 un clásico indiscutible: tiempos de ataque y liberación extremadamente rápidos, el célebre y versátil modo All-Button-In, un manejo intuitivo y una capacidad sobresaliente para integrarse con cualquier tipo de señal. Las múltiples modificaciones del modelo original, reproducidas con precisión en el Bluey, se reflejan en un característico realce de frecuencias medias que complementa a la perfección la voz humana. Gracias a ello, este compresor logra aportar una fuerza y una presencia excepcionales al material vocal sin generar artefactos ni comprometer la naturalidad del sonido.
Por supuesto, el Bluey de Black Lion Audio no se limita al procesamiento vocal. Este compresor demuestra la misma eficacia y carácter en todas las aplicaciones clásicas del 1176, como guitarras de rock o overheads, lo que lo convierte en un equipo versátil y lejos de ser un “one-trick pony”. No obstante, es en las voces donde realmente brilla, ofreciendo un rendimiento excepcional y un color sonoro difícil de igualar. Si el presupuesto para un compresor vocal específico supera los mil euros, el Bluey se presenta como una opción profesional de altísimo nivel, con un carácter único y un inconfundible toque de “mojo”.
Black Lion Audio es una empresa estadounidense con sede en Chicago, reconocida por sus modificaciones de preamplificadores de micrófono, convertidores digital-analógico y procesadores de señal muy valorados en la industria. Su catálogo también incluye desarrollos propios, como el Power Conditioner PG-1 Type F, diseñado íntegramente por la compañía. Desde sus inicios, el equipo de Black Lion Audio se ha centrado en fabricar dispositivos de alta calidad tanto en sonido como en acabado, consolidando así su reputación internacional en el sector del audio. Con el lanzamiento del Revolution 2x2 en 2021, la empresa amplió su gama incorporando una interfaz de audio compacta que refleja toda la experiencia acumulada a lo largo de los años.
Una vez probado, el Black Lion Audio Bluey suele convertirse en un fijo del bus de voz principal, donde su réplica del compresor favorito de Chris Lord-Alge revela todo su potencial. Como admirador declarado de las consolas SSL 4000, Chris suele emplear su Bluey en la inserción de una de estas mesas, por lo que, para acercarse a ese sonido icónico, lo ideal es combinar el Bluey con un canal SSL adecuado. Sin embargo, Black Lion Audio también ha pensado en quienes cuentan con presupuestos más ajustados: el Bluey incorpora tres amplificadores operacionales que recrean los circuitos de búfer de las inserciones de una SSL 4000, garantizando así la máxima autenticidad incluso al conectarlo directamente a un DAW.