Estas cuerdas suenan muy bien, equilibradas, y mantienen un buen tacto, que permite una acción fluida, mucho tiempo.
Eso sí, las últimas cuerdas pueden ser demasiado gruesas para algunas clavijas de afinación. Las compré para una telecaster custom '72, y las últimas cuerdas no entraban, por suerte pude utilizarlas en una epiphone casino, que uso con más frecuencia en afinaciones abiertas para tocar slide. Para ese uso (afinaciones más bajas) son ideales porque ese grosor hace que no resulten flojas aún bajando algo la tensión.