La correa no es especialmente 'bonita'. Estéticamente quedará mejor según en qué guitarra la instales, y, obviamente, a algunos les gustará más que a otros, pero a nivel práctico es práctica, consistente y segura.
El cierre es cierto que se se mantiene sorprendentemente en su sitio sin necesidad de ningún clip ni ningún elemento de seguridad extra, simplemente la instalas en los soportes de la guitarra y tiras un poco hacia arriba.
De hecho me cargué la entrada de jack de una Gibson Les Paul hace unos años porque se me soltó la correa y dio en el suelo, ojalá hubiera conocido algún sistema como este antes.