Es el primer producto de este tipo que pruebo y es muy probable que sea el único de mi elección durante un largo tiempo.
Limpia y lubrica las cuerdas a la vez, lo que hace que mis dedos se muevan a toda leche tras aplicarlo, además, huele de maravilla.
El único inconveniente es que al principio se hace algo extraño el tacto suavín que deja en las cuerdas, además de que tienes que limpiarlo bien en cada pasada con la gamuza que lleva incluida, pero una vez te acostumbras pasará a formar parte de tu equipo seguro.
Yo lo aplico antes y después de tocar, para deslizarme mejor mientras me muevo por el mástil, y para dejarlas bien limpitas al terminar. Sin duda está alargando la vida de mis cuerdas (y de mis dedos).