La cejuela requiere poco trabajo para adaptarse perfectamente a un radio de 9,5”, en mi caso, de una American Special Strat. Un poco de lija en la parte del hueco de encaje ha sido suficiente, porque de todas maneras la parte que apoya sobre el diapasón (que no tienen las cejuelas “standard”) hace que el apoyo se produzca sin demasiado esfuerzo. No he notado diferencia sustancial en el tono. La guitarra desafina menos, aunque no sé si esto es atribuible a los clavijeros de bloqueo que le he instalado o a la cejuela nueva. Quizá con más tiempo aprecie más la diferencia aunque de momento creo que con una buena cejuela de hueso bien trabajada habría sido suficiente.