La Harley Benton DS-10 Mini es una guitarra muy bonita a la vista y llamativa por su precio extremadamente barato, pero en cuanto a calidad se queda muy por debajo de lo deseable. La construcción es pobre, la sensación al tacto es básica y el sonido es muy malo, incluso después de cambiar las cuerdas. Además, le cuesta mantener la afinación, lo que hace que tocar resulte frustrante. No la recomendaría ni siquiera como guitarra de iniciación, porque existen opciones económicas con mucha mejor estabilidad, sonido y durabilidad. Puede servir como guitarra de viaje muy barata o como instrumento para niños pequeños que solo necesiten algo básico para trastear, pero incluso en esos usos hay alternativas claramente superiores.