El trémolo perfecto. Preciso. Instalado jueves y viernes en el escenario.
Como obseso de la afinación, no creia que fuera posible. Pensaba que me costaria un tiempo ajustarlo, ya que debido a mi estilo, el uso de la palanca es constante, por lo que con los trémolos que he utilizado hasta ahora he sufrido el castigo de tener que afinar constantemente.
Con el Kahler K 7300 CH eso a terminado. Ahora paso el afinador solo para tener la satisfacción de comprobar que todo esta en su sitio. Es un alivio la seguridad que proporciona.