K&M 18950

Es un stand muy, muy estable, con él el teclado no se moverá en absoluto. A cambio la desventaja es que pesa mucho, no lo recomendaría para transportarlo para conciertos, sí para dejarlo fijo, ya sea en casa, local, estudio, para eso es muy cómodo por su estabilidad. Pero para conciertos hay otros mucho más transportables. Tiene altura regulable, lo que permite ponerlo a la altura adecuada para cada persona.

Lo compré para un Kawai MP-10 que pesa bastante (32 kg.) y la verdad es que lo sujeta bastante bien, se acomoda perfectamente en anchura y altura, dando sensación de firmeza y estabilidad. Lo único que parece un poco endeble son justo los apoyos de las patitas al suelo ya que parecen pequeñas y aunque están bien pensadas, ya que son basculantes y regulables en altura para adaptarse al suelo, la sensación que dan es de ser un poco endebles; pero la verdad es que una vez montado es un soporte mu robusto.