Este soporte de mesa cumple su función perfectísimamente tanto con micros muy ligeros como el 747, como con micros del estilo del sm 58 o inalámbricos. Es estable en la mesa y de fabricación resistente, aunque hay que cuidar la pintura, que se puede rayar con cierta facilidad. Además, para micros con su propio "gooseneck" como el 747, la barra se puede quitar y enroscarlo directamente a la base. El que se pueda enroscar y desenroscar la barra también lo hace más fácil de guardar y transportar. Seguramente compre alguno más próximamente.