Compré este pequeño teclado para llevármelo de vacaciones y poder grabar ideas en mi portátil a través de USB/MIDI.
Lo primero que me sorprendió fue la calidad de fabricación. Las teclas no tienen ni mucho menos el tamaño estándar, pero no cuesta nada acostumbrarse a su tacto y rápidamente se puede tocar casi con tanta precisión como la que se tiene con sus hermanas mayores.
Lo mismo se puede aplicar a las ruedas de pitch bender y modulación: se manejan con soltura y te acostumbras en seguida.
Es muy útil que tenga tan cómodamente el cambio de octava, para bajar y subir con comodidad dado que el teclado sólo cuenta con 37 teclas. Por lo que había leído al comprarlo, no estaba seguro de si se le podría conectar un pedal de sustain o no, y la respuesta es afirmativa, y funciona perfectamente.
El software de instrumentos virtuales que incluye la verdad es que no me lo he descargado por pereza, pero no tiene mala pinta.
En resumen, un teclado muy útil para llevártelo a cualquier parte y capturar tus ideas con comodidad y calidad estés donde estés.