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5. Materiales

La madera ha sido el material tradicional empleado en todo el mundo para la fabricación de flautas. Pero si también el sonido se produce a partir de la corriente de aire desde la boca y el aire en el tubo de la flauta, las condiciones en el interior de la flauta tienen gran influencia en el sonido del instrumento.

El material debe ser preferentemente de tipos de madera que se dejen taladrar con facilidad, y por otro lado que tenga un bonito color y se deje pulir finamente, de manera que proporcione un atractivo adicional al del mismo sonido del instrumento.

La madera más utilizada antiguamente era la de boj, entre otras cosas porque otras maderas nobles como el ébano, jacaranda, palisandro, cocobolo, olivo y tulípero eran demasiado valiosas, y por tanto no asequibles para todo el mundo (la madera de ciruelo, por ejemplo, era tintada en negro para asemejarla o imitar artificialmente al ébano). Las maderas nobles tienen un sonido brillante y radiante, además de gran riqueza en armónicos. Con todo ello se pueden reconocer también diferencias especificas respecto al sonido de cada madera.

El peral, el ciruelo y el arce suenan por ejemplo más suaves. Al ser estas maderas algo menos densas, las paredes interiores se tornan ásperas con mayor facilidad. Por este motivo frecuentemente son impregnadas con parafina por los fabricantes.

Lo más idóneo para ser trabajadas, son las maderas con pocas astas y densas, con un veteado lo más paralelo posible.


Arce
(Acer pseudoplatanus)

Ahorn

Peso específico: 0,63

Sonido: Suave y ligero

Zona de crecimiento: Canadá, Europa Central


Peral
(Pyrus communis)

Birnbaum

Peso específico: 0,65

Sonido: Cálido, tono fundamental

Zona de crecimiento: Europa Central


Ciruelo

Pflaume

Peso específico: 0,79

Sonido: Terroso

Zona de crecimiento: Europa Central


Maracaibo
(Gossypiospermum praecox)

Buchsbaum

Peso específico: 0,80

Sonido: Cálido, transparente

Zona de crecimiento: Sudáfrica


Olivo
(Olea europaea)

Olive

Peso específico: 0,85

Sonido: Lleno, abierto

Zona de crecimiento: Sur de Europa


Boj Europeo
(Buxus Sempervirens)

Europ. Buchsbaum

Peso específico: 0,95

Sonido: Claro, rico en armónicos

Zona de crecimiento: Europa Central/Sur de Europa


Tulípero
(Dalbergia frutescens var. tor.)

Rosenholz

Peso específico: 0,95

Sonido: Cálido, transparente

Zona de crecimiento: Sudamérica


Palisandro
(Dalbergia stevensonii)

Palisander

Peso específico: 1,05

Sonido: Terroso, equilibrado y potente

Zona de crecimiento: Sudamérica


Granadilla
(Dalbergia melanoylon)

Grenadil

Peso específico: 1,20

Sonido: Elegante, rico en armónicos

Zona de crecimiento: Mozambique


Las flautas con paredes interiores muy hebrosas, de principio, presentan menos cualidades de eficiencia para extraer el mejor sonido de un instrumento que las que tienen su interior completamente liso.

Las maderas duras no proporcionan el mejor paso de aire, pero mantienen su buen sonido con el transcurrir del tiempo (lamentablemente estas maderas tienen más riesgo de agrietarse, por lo que se deben tratar cuidadosamente), mientras que las maderas blandas permiten mejor el paso de aire, aunque se apaguen rápido. No obstante recomendamos a los principiantes más bien una flauta de madera suave.

Las flautas dulces de plástico tienen la ventaja de ser muy resistentes al desgaste, pero son recomendables únicamente como instrumentos de iniciación.

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