Durante mucho tiempo se ha considerado la carencia de sensaciones hápticas como la gran desventaja de los Plugins, porque estos se manejan principalmente a través del ratón. Sin embargo, además de las teclas en blanco y negro de un teclado, muchos controladores MIDI también disponen de reguladores para enviar datos de control. Estos reguladores pueden ser asignados para comandos de control a los parámetros de un Plugin. Un procedimiento que antes solía resultar bastante engorroso, porque que el usuario tenía que realizarlo manualmente para cada Plugin. Pero ahora esos inconvenientes han dejado de existir con la gran cantidad de controladores a disposición. Por un lado, los controladores vienen ya con protocolos instalados por el fabricante que permiten el manejo de Plugins esenciales en el entorno de un software DAW. Por ejemplo, es posible manejar de forma remota un Plugin de ecualizador o sintetizador directamente desde el controlador MIDI.
Además de los controladores MIDI universales, cuyos reguladores generalmente se pueden asignar libremente, también existen controladores dedicados que están pensados para realizar tareas especiales. Native Instruments KOMPLETE KONTROL o bien MASCHINE, Arturia KeyLab o Softube Console 1 se cuentan entre estas soluciones. Con estos sistemas de interconexión, compuestos por un controlador MIDI y un Plugin-Wrapper (interfaz de software para Plugins), el usuario ya no tiene que asignar manualmente los parámetros de los Plugins de software a los elementos de control del hardware del controlador MIDI. Más bien, el fabricante ya lo ha hecho, por lo que los usuarios pueden comenzar operar con el controlador directamente. Dependiendo del fabricante incluso se pueden ajustar las preasignaciones de forma individual.