Podemos diferenciar básicamente dos tipos de micrófonos:
Estos últimos funcionan bajo un principio „inverso“ al de los altavoces. Junto a una membrana se asienta una bobina móvil, que se encuentra expuesta a un campo magnético. A través de los movimientos de la bobina móvil dentro del campo magnético, se induce en el mismo una tensión análoga a las oscilaciones sonoras.
Los micrófonos dinámicos, por norma general, son considerados muy robustos, y ofrecen un buen comportamiento frente a las realimentaciones. En el escenario son idóneos sobre todo para señales „centradas“. Por eso son popularmente escogidos para voces (prioritariamente en Metal, Rock, Pop) o por ejemplo para el registro de amplificadores de guitarra o cajas / Toms de batería.
Por otro lado, los micrófonos de condensador se basan en el efecto generado por alteración de capacidad en un condensador a partir de la variación de la distancia entre dos placas de condensador. La membrana, extremadamente delgada, representa una de las dos placas del condensador. Si hay tensión aplicada, la variación de capacidad, análoga a la oscilación sonora, puede aprovecharse para la obtención de señal.
Las ventajas de los micrófonos de condensador se encuentran en sus características sonoras especialmente ricas. Los micrófonos de condensador frecuentemente ofrecen un rango de frecuencias más amplio que los micrófonos dinámicos, especialmente en el rango superior en frecuencias muy agudas. También el comportamiento de impulso es mejor en estos micrófonos. La delgada membrana de los micrófonos de condensador es mucho más ligera que la de un micrófono de bobina móvil, donde la ya de por sí relativamente pesada bobina móvil se encuentra encajada detrás. La delgada membrana de un micrófono de condensador puede seguir un corto impulso de onda sonora de forma mucho más precisa, comparando con el pesado comportamiento de la más gruesa membrana de un micrófono de bobina móvil.
En la práctica es reconocible el comportamiento más preciso de los micrófonos de condensador, entre otras cosas, en la mejor resolución en consonantes de locuciones como la D y la T. El rango de transmisión más amplio también se aprecia en los sonidos sibilantes como S y Sch. El micrófono de condensador aporta la sensación de un sonido que respira mejor y es más realista, donde el micrófono dinámico muestra mayor presión y un sonido más musculoso. Esto son solo tendencia fundamentales. Porque también existen micrófonos dinámicos con muy buena resolución, como por ejemplo el M88 de Beyerdynamik, que ha usado Phil Collins desde hace décadas, e incluso a algunos Rockers como Bryan Adams se les ha viso con micrófonos de condensador como el Neumann KMS 105. ¡Hay que ser abierto!
Uno de los errores más comunes con respecto a cómo coger un micrófono en el escenario es la técnica a dos manos. Como hemos mencionado anteriormente, esto tiende a encubrir los puertos en los micrófonos cardioides, haciéndolos más propensos a las realimentaciones, ya que el sonido de la parte trasera no puede ser rechazado. El micrófono se sujeta mejor con una mano, con los labios casi tocando la pantalla metálica, o al menos a una distancia de no más de 6 pulgadas, y directamente sobre el eje de la parte delantera del micrófono. Ya que la compresión no se utiliza a menudo en situaciones en vivo, un cantante con una buena técnica de micro, sujetará el micrófono un poco más alejado cuando lleguen las notas más altas, que de otra manera sonarían demasiado fuertes.
No, hablando en términos generales, cualquier micrófono dinámico de mano sería adecuado, pero tratar de buscar uno con una buena pantalla anti-vientos para esos sonidos oclusivos (Ps y Bs).
Un interruptor on/off puede ser útil cuando no hay nadie atendiendo la mezcla en un concierto, o en bares de copas donde se reproducen varios tipos de equipos, de modo que el micrófono pueda apagarse durante las pausas. De lo contrario, es mejor evitar los interruptores, ya que pueden conectarse o desconectarse accidentalmente durante la interpretación.
No, a menos que sea un viejo micrófono de cinta (¡que no se recomienda para su uso en vivo!), no debería pasar nada malo.
La forma más sencilla de hacerlo, sería tomar una señal estéreo de la mesa de mezclas principal, a una grabadora estéreo digital o grabadora de CD de audio dedicada. Sin embargo, para obtener los mejores resultados, es posible que desees utilizar un splitter de micro multi-vía y grabar a un multi-pista, a través de una mesa separada -a continuación, puedes mezclar los resultados a tu ritmo en el estudio, y con la ventaja de tener a tu alcance mucho más equipo. Quizá deberías considerar utilizar un par de micrófonos para el público, y así añadir algo de la atmósfera del concierto.
Los sistemas inalámbricos avanzados de hoy en día suenan muy bien y apenas se pueden distinguir de un micrófono con cable en términos de sonido. Todo lo que se debe considerar (además de las regulaciones legales) lo podrás encontrar en nuestra guía de micrófonos inalámbricos.