Hay muchas razones para mantener frescas las cuerdas. Por ejemplo: Mejor calidad y respuesta de sonido, mayor dinámica y más amplias posibilidades sonoras. Además de eso la guitarra también muestra mejor aspecto y mejor sensación al toque. Precisamente las cuerdas de las guitarra acústicas tienen un proceso de degradación muy rápido por la suciedad y la oxidación, por esto deben cambiarse regularmente. Esta es la regla general: Si se toca cerca de una hora diaria, tras una semana, si se toca una hora a la semana, tras un mes y se toca muy muy poco, tras unos dos meses se deben cambiar las cuerdas.
En los cambios de cuerdas se cometen bastante a menudo un par de fallos, aquí están los más usuales:
Recuerda: Utiliza siempre que sea posible el mismo grosor de cuerdas que montaba la guitarra previamente, de lo contrario podría ser necesario un nuevo ajuste de la tensión del mástil (alma).
Para esto no necesitas mucho, pero un par de herramientas pueden facilitar el trabajo:
Retirar todas las cuerdas - básicamente cambiar las cuerdas una detrás de otra y no todas a la vez. Esto respeta la relación de tensión de la guitarra así como de la mecánica del Tremolo manteniendo su estabilidad de afinación.
Saca el pivote del puente (el pequeño Pin que sujeta las cuerdas al puente) y saca la cuerda vieja. En la mayoría de manivelas de cuerdas hay una muesca que ayuda a levantar los pivotes.
Introduce la nueva cuerda en el puente por la parte del Ball-End.
Vuelve a colocar el pivote prestando atención a llevar la cuerda por la guía tallada en el mismo. Presiona con fuerza al mismo tiempo que tiras de la cuerda para que se ajuste bien bajo la tapa.
Ahora hay que girar la mecánica hasta que el agujero del eje se sitúe perpendicular al mástil enhebrando la cuerda hacia afuera desde el interior. La cuerda debe ser tensada ligeramente.
Aquí está el truco para que la cuerda quede fijada a prueba de bombas sin necesidad de bobinarla demasiado a la mecánica:
Llevar la cuerda a un lazo sobre la mecánica y sobre sí misma.
Atención: Estas indicaciones son únicamente para cuerdas estándar con entorchado redondo "Round Wound". Las cuerdas con terminación plana "Flatwound Saiten“ deben ser bobinadas 2 o 3 veces a la mecánica, sino podrían soltarse.
Entonces se estira la cuerda al tiempo que se dobla hacia arriba. De esta forma se engancha por la tensión la cuerda en sí misma y ya no puede resbalar. Además se necesita bobinarla tan poco que apenas se precisa de una manivela. Mientras se tensa, se presiona la cuerda un poco hacia abajo, de manera que el bobinado va también hacia abajo.
Una vez tensada se debe estirar la cuerda un poco para que mantenga la afinación. En las cuerdas agudas esto debe hacerse con sumo cuidado, mientras que en las graves se puede estirar tranquilamente algo más fuerte.
Finalmente se corta el retal de cuerda sobrante con una cortador de cuerda y la primera cuerda ha sido cambiada de forma óptima.
Solo queda repetir el procedimiento con el resto de las cuerdas - Voila, listo.