Al principio, como casi todos los cambios, es dificil adaptarse a su forma, al espacio entre la caña y la boquilla. Pero una vez que vas haciéndote a ella, no solo da un toque más expresivo, sino que amplifica el sonido, sin hacer que los pianos dejen de serlo.
Ha sido un acierto, ya que siempre había probado con boquillas de caucho, y haber comprado este producto ha merecido la pena al 100%. Ya no solo por su gran calidad, sino por la experiencia como tal.