Debido, en gran parte, al estilo de música que practico (punk-rock, heavy -metal) y a la contundencia con la que toco la batería, siempre he tenido problemas con la duración de mis platos.
Sin embargo, en la gama Paiste Rude, he encontrado una variedad de platos que aguantan mis exigencias como batería con respecto a la duración de éstos.
Son platos muy resistentes y con un sonido tan potente que, aunque pueda ser exagerado en locales de ensayo pequeños, no necesita de amplificación en los conciertos. En particular, el Paiste 18" Rude Wild Crash, me permite conseguir unos golpes acentuados de gran sonoridad. Muy recomendable.