El Splash tiene un sonido particular, agudo y brillante. Con poco sustain, se apaga rápidamente. La China es algo mejor, pero he de decir que no tienen un sonido espectacular. El material y el grosor de los platillos es suficiente, pero endeble. Presentan un acabado brillante natural. Cumplen su misión, pero para oídos no excesivamente exigentes.