Este interfaz de audio supone un salto de calidad importante dentro de la gama de rango medio-alto. Se percibe inmediatamente la calidad de grabación en sus previos y, sobre todo la fluidez en el trabajo al integrarse perfectamente con el DAW (en mi caso Logic X) y ofrecer características de latencia muy bajas. Ofrece además salidas dedicadas para reamp, entre otras opciones de conexión interesantes. Estaba buscando una mejora tras utilizar una tarjeta con similares especificaciones de entradas y salidas y, por el momento, creo que he acertado totalmente. Solo criticaría el hecho de que anule dos de las entradas traseras al utilizar las de instrumento delanteras.