Aíslan bastante bien del ruido exterior, pero ahí acaban sus virtudes. Por un lado, la calidad del sonido deja mucho que desear; tampoco se supone que son para escuchar tus discos favoritos en alta fidelidad -son para lo que son- pero sí que creo que podrían sonar mejor. Y luego está la comodidad. Las almohadillas son muy finas, lo cual hace que el interior del auricular te aplaste la oreja - no puedo estar más de media hora seguida con ellos puestos porque me duelen mucho las orejas. No los mandé de vuelta por lo costes, pero la verdad es que en poco tiempo compré otros de otra marca y estos se fueron al cajón.