Unas cuerdas de entorchado plano de excelente fabricación. La misma marca es un estándar en cuerdas de violín y viola, lo que da una idea de su saber hacer.
Sus calibres en las graves son algo más finos que en marcas competidoras, lo que se traduce en una mayor flexibilidad y duración de vibración. También en unos kilitos menos, a nivel de tensión en tu mástil.
El sonido que dan estas cuerdas es el típico de las cuerdas para archtop, de entorchado plano, es decir un sonido equilibrado pero tirando si acaso más a medios que a extremos del espectro, redondo, cálido, y con un decaimiento más bien rápido. Lo contrario de lo que se busca en el rock&roll, pero es que el jazz es así, exige un fraseo fluido, rápido, y en el que cada nota suena (o tiende a sonar) como staccato aun cuando se toque legato...
Como detalle no muy positivo, son un poco carillas. Pero eso sí, duran una eternidad, conservando sus propiedades de afinación, entonación, flexibilidad y tono.
Una MUY BUENA opción para guitarristas de jazz, sin ninguna duda.