Es mi primera Ibanez y tengo que decir que me he llevado una gran sorpresa. Tengo guitarras de otros fabricantes, algunas de ellas mucho más caras que ésta. Pero ésta Ibanez es la más cómoda que he probado y tenido nunca, el mástil es rápido, no pesa casi nada, tiene muchos rebajes, no cabecea, y el color entre azul y violeta me encanta.
Las pastillas son muy decentes, pero tienden a pasarse de agudos por que están diseñadas para la distorsión, hoy en día con los multiefectos puedes ecualizarlas al gusto y problema resuelto.
El mástil venia muy bien ajustado de fábrica, no trasteaba ni tenía notas muertas. Un repaso y lo puedes dejar de 10. La cejuela es de buena calidad, está fabricada con un material compuesto reforzado con fibra, parecido a las graphtech pero producido por algún proveedor de Ibanez.
Los afinadores se parecen sospechosamente a los Gotoh, y funcionan muy bien. El puente hace su función perfectamente y no da problemas. El instrumento mantiene muy bien la afinación, aunque debido a la delgadez de su mástil es muy sensible a los cambios de temperatura y humedad, por lo que con cambios bruscos de tiempo hará que tengas que ajustarla.
Estéticamente me gusta aunque como es de esperar tiene sus fallos de acabado, pero son cosas que prácticamente no se ven, y por lo general tiene un acabado correcto. La mía tiene un cuerno afilado como una aguja, si apoyas el brazo en el te pinchas, y un fallo por detrás de la pala donde tiene una mancha de 3mm de largo, pero que casi no se aprecia. Por lo demás está impecable.
Es una guitarra que recomendaría sin duda, sobre el papel no está a la altura de otras del mismo precio, pero no encontrarás nada que se deje tocar tan bien.