Necesita phantom power para funcionar y hace lo que promete: subir los dBs a los que graba tu micro dinámico.
El "problema" es que no siempre es necesario. Mi micrófono dinámico (un AKG Pro41 normalito) al 95% de ganancia en mi interfaz (Steinberg UR22mkii) sonaba igual de bien, de alto y de limpio que con la interfaz al 40% de ganancia utilizando este booster.
Conclusión: si tienes una interfaz con preamplificadores de calidad (cualquiera de 100€ e incluso las Behringer Uphoria, que son más baratas), no creo que necesites este producto salvo para aplicaciones muy concretas: quizá un directo, un videostreaming... si es para grabar teniendo después la opción de subir el volumen en postproducción, ahórrate los 20€.
Por otra parte, por ese poco dinero, cumple con lo que promete, es pequeño, silencioso...
Eso sí, la fabricación deja un pelín que desear: desconectarlo del micro (via XLR) era un dolor y daba la sensación de que el conector del booster cedía un poco. Cuidadito con eso porque puede que no dure mucho.