Hay muchos tipos diferentes de señal de audio. En el dominio analógico, las señales se distinguen principalmente en términos de su nivel, el cual en términos simples significa generalmente voltaje eléctrico. Un micrófono produce en comparación, una señal débil la cual debe ser amplificada antes de poder hacer algo útil con ella. Hablar a través de un micrófono normalmente genera una señal de alrededor de 1 a 2mV (milésimas de voltio), mientras que una señal de varios voltios debe ser aplicada a un altavoz para producir un volumen similar de sonido.
Entre estos dos extremos, el concepto de "nivel de línea" ha venido a definir el nivel estándar en el que la mayoría de los dispositivos de audio se comunican. Realmente, hay dos estándares de nivel de línea diferentes de uso común - en términos muy generales, los productos de consumo y los semi-profesionales utilizan el estándar de -10dB (0,316V), mientras que los profesionales tienden a favorecer el estándar de +4dB (1,23V).
La simple razón de esto es que todas las señales analógicas son susceptibles a la interferencia electromagnética, provocando diversos tipos de ruido. Las señales débiles son mucho más propensas a esto, ya que cualquier ruido será mucho más fuerte en relación a la señal. El sonido de alta fidelidad que ahora damos por sentado no sería posible si las señales de micrófono no se intensificaran inmediatamente hasta el nivel de línea antes de ser grabadas, mezcladas o procesadas de alguna forma.
Un preamplificador de micrófono se encarga de esta tarea. Cualquier dispositivo de audio con una entrada de micrófono contendrá un preamplificador de micrófono muchos mezcladores contienen docenas uno para cada canal.
Algunos mezcladores son, por supuesto, muy apreciados por la calidad de sus preamplificadores de micrófono, pero éstos tienden a estar en el extremo más alto del mercado. Las mesas más asequibles, por lo general, tienen que comprometerse en algún lugar con el fin de llegar a un precio razonable los preamplificadores de micrófono de alta gama de 24 o 32 canales, simplemente no abarcan este rango de precios.
La colocación de un preamplificador de micrófono en la misma caja que los componentes que llevan otras señales eléctricas puede dar también como resultado interferencias. Esto puede afectar a mezcladores con preamplificadores de micrófono integrados, así como a dispositivos de grabación del ordenador tales como tarjetas de sonido e interfaces de audio externos.
Los preamplificadores de micrófono autónomos tienen por objeto solucionar estos problemas y más. Muchos proyectos de grabación no implican la grabación de muchas pistas simultáneamente, aunque se añadan una gran cantidad de pistas finalmente. Por ejemplo, las voces principales a menudo son las partes más expuestas sónicamente en una producción pop, sin embargo, casi siempre se graban con un único micrófono. Los preamplificadores de micrófono externos nos brindan grabaciones de alta calidad para aquellos que no pueden permitirse el lujo de pagar mucho dinero por una mesa, o no lo necesitan porque sólo graban un canal a la vez.
Los preamplificadores de micrófono externos también ofrecen un potencial sónico mucho mayor. Muchos estudios profesionales tienen racks con diferentes preamplificadores, y un ingeniero experimentado tendrá que tomar decisiones basadas en los instrumentos o los cantantes que están siendo grabados y el resultado final deseado. Para el trabajo creativo sónicamente, muchos considerarían secundaria la elección del preamplificador, dando prioridad a la elección del micrófono, cada uno tiene su propio carácter único.