El pequeño módulo line array HDL 6-A, con el que principiantes y profesionales pueden generar auténtica presión sonora made by RCF en localizaciones pequeñas, resulta fácil de configurar y tiene un precio bastante atractivo. Y para poder obtener un buen sonido de inmediato, está ya casi todo preestablecido. En comparación con otros line array de pequeño tamaño, un HDL 6-A ofrece una experiencia de sonido con bastante fuerza expresiva tanto en los graves como en los agudos. La carcasa es compacta y ligera. Gracias a una herramienta especial disponible opcionalmente, no se necesitan conocimientos de rigging para garantizar que el frente de onda del sistema llegue al público. Pero todos los que aman las ventajas de los altavoces suspendidos pueden estar tranquilos: también está disponible como accesorio un soporte de montaje en volado en condiciones.
Con un valor máximo de 131dB SPL, cada HDL 6-A es capaz de proporcionar presión sonora en abundancia desde 65Hz hasta 20kHz. El sonido se optimiza mediante un simple botón Boost para corregir las frecuencias altas. El formador de ondas desarrollado por RCF garantiza que especialmente los agudos se escuchen con un patrón de cobertura definido de 100° en horizontal y 10° en vertical. Alimentados por un amplificador de potencia digital de dos canales, que amplifica con un total de 1400W de pico y 700W de potencia continua, dos woofers de neodimio de 6" con bobina móvil de 2" y un motor de compresión de neodimio de 1" con 1,75" que comienzan en 900Hz se encargan de proporcionar un sonido con precisión y fidelidad. Un HDL 6-A sólo da 11,5kg en la báscula.
Los organizadores de eventos sonorizan con un RCF-Line Array equipado con módulos HDL 6-A para proporcionar en lugares pequeños un sonido preciso con las ventajas de un line array auténtico. En conciertos en vivo, la caja con su máximo nivel de presión sonora responde a la exigencia, al tiempo que ofrece una clara inteligibilidad del habla durante representaciones teatrales, lecturas y debates en salas pequeñas. Pero lo más importante es que un array HDL con altavoces 6A es rápido y fácil de montar. La clara interfaz de usuario hace posible que los principiantes manejen sin dificultades el array. Los proveedores de servicios tecnológicos combinan todas estas ventajas y celebran el reducido peso individual de cada caja, con sólo 11,5kg. Durante las giras, el tamaño de la configuración puede adaptarse rápidamente a cada localización.
El fabricante italiano RCF comenzó su andadura en 1949 con la producción de micrófonos, ampliando su catálogo posteriormente para incluir diversos productos para sonorización en la década de los años 1950s. Con la creación de su propio departamento de desarrollo de altavoces, RCF logró hacerse un nombre y convertirse en proveedor de numerosos fabricantes de altavoces de renombre en USA y Europa. Los altavoces Hi-Fi también forman parte de la gama desde 1970 y a partir de 1980 además se dedican a la amplificación de audio en el sector de la automoción. Desde 1990 y hasta la actualidad, RCF ha sido uno de los mayores proveedores del mercado de altavoces profesionales.
En localizaciones pequeñas puede ser suficiente un cluster de altavoces compuesto por unas pocas unidades HDL 6-A colocadas sobre un trípode. Se pueden colocar hasta tres módulos HDL 6-A uno encima del otro en el RCF Pole Mount HDL6 sin ningún conocimiento en rigging. Si el conjunto va a montarse en volado, el RCD HDL 6 A Fly Bar Lite, con capacidad para hasta 16 módulos de altavoces, ofrece el marco adecuado y puede ser fijado con el RCF Adapter Clamp HDL6. El marco flotante también contiene un soporte para un subwoofer opcional. RCF recomienda el subgrave HDL 12-AS adecuado en cuanto a las dimensiones. El número de subgraves se puede adaptar al estilo de música.