Sorprendentemente este micrófono de amplificador, no tan conocido como el clásico Shure SM-57, posee unas cualidades sonoras que, para mi gusto y el de muchos otros, es mucho más completo que su competidor. Su sonido es MUY claro, cálido, y brillante, captura a la perfección todo el rango dinámico de frecuencias que emite el amplificador. Un 10 para este microfonazo que hace honor a la gran marca que representa.
Por poner algo negativo, que más que una pega es una recomendación (estoy seguro de que ocurre con todos los micrófonos), es conveniente situarse con el instrumento a cierta distancia del amplificador con el micrófono, ya que a pesar de ser supercardioide, para obtener un sonido nítido y sin ruido, es mejor alejarse lo más posible.