Utilizo estos auriculares tanto para escuchar música como para tocar el bajo. Considero que son mejores para lo segundo que para lo primero, por las razones que daré ahora.
La calidad de sonido es sobresaliente en todos los registros y volúmenes, sobre todo si valoras la fidelidad de sonido. Es decir, no maquillan tanto el sonido como los típicos auriculares comerciales. No aíslan el sonido exterior, lo cual valoro positivamente cuando practico con mi instrumento por largo tiempo, ya que puedo escuchar si me habla una persona, si tocan en la puerta o si suena el móvil. Sin embargo, puede ser una desventaja a la hora de escuchar música en un ambiente algo ruidoso. Su cable de tres metros permite cierta libertad de movimiento entorno al dispositivo conectado, aunque puede ser algo molesto para, por ejemplo, escuchar música por la calle. No los considero especialmente cómodos por su tamaño quizá demasiado grande y una presión algo molesta sobre la cabeza. Además, su construcción es mejorable, teniendo en cuenta además que el cable no es extraíble. Sin embargo, el bajo precio hace de este producto una compra más que recomendable.
Si el hecho de que sean abiertos se adecuan al uso que les quieres dar, pienso que es de las mejores opciones de compra en un rango de precio bajo.