Llevaba mucho tiempo queriendo tocar el violín, pero no tenía posibilidad de acudir a ningún profesor para aprenderlo, por lo que buscaba un instrumento de calidad media para comprobar si realmente me gustaba. Soy pianista desde hace varios años, así que tengo nociones de música y pude comenzar a tocar el violín de forma autodidacta. Desde el principio me sorprendió la relación calidad-precio: es un producto muy barato para lo que ofrece: el sonido es muy bueno, y la fabricación, óptima. Y estéticamente, es precioso. No soy violinista profesional, así que no puedo comparar con otros modelos de violín, pero para quien quiera probar o comenzar, sin duda es el instrumento ideal. A día de hoy, me encuentro muy satisfecha con él.