4. Mesas de mezcla analógicas y digitales
También en el ámbito de las mesas de mezclas hace tiempo que terminó calando la tecnología digital. Precisamente en el rango de mayores dimensiones (modelos desde los 16 canales o las 24 entradas mono) realmente apenas existen hoy consolas analógicas.
¿Por qué?
En un mezclador analógico se dispone de un control dedicado para cada función. Para poder acoger ya un cierto número de entradas, buses y un ecualizador sofisticado, se puede alcanzar rápidamente un tamaño considerable:
Consola analógica de 48 canales. Licencia: CC BY-SA 3.0 (https://adn.harmanpro.com)
Con ello, además se requerirán uno o más Sideracks de gran tamaño y costosos para ecualizadores gráficos, puertas, compresores y, a menudo, incluso la fuente de alimentación del mezclador. Con 48 canales, que todos ellos se han de comprimir, 12 buses de monitorización con ecualizador gráfico y 4 dispositivos multiefectos externos, se termina con 64 dispositivos que necesitan ser conectados.
Sideracks con equipos analógicos. Licencia: CC BY-SA 3.0 (https://www.creasound.net)
Los mezcladores digitales generalmente ofrecen ya integrados para cada canal una puerta, un compresor y un ecualizador de ajuste superfino, además de varios dispositivos de efectos y ecualizadores gráficos.
La ventaja es evidente: se ahorra muchísimo espacio, peso, cableado y, por norma general, costes. El mismo número de canales que hemos visto en el ejemplo anterior (48 entradas, 12 buses de monitorización) se puede encontrar, por ejemplo, en el siguiente mezclador digital:
Mezclador digital compacto de 48 canales
Los mezcladores digitales por tanto ofrecen mucha potencia en un espacio reducido. Sin embargo, a veces lleva un poco más de tiempo llegar a la función deseada. A menudo hay que navegar entre los submenús
Dado que el tema de las consolas de mezcla digitales es extremadamente extenso, le hemos dedicado guía online propia. A quien desee profundizar más sobre este tema le recomendamos encarecidamente visitarla.
Pero aquí están resumidas las ventajas y desventajas básicas de ambos mundos:
Teniendo en cuenta que la tecnología digital se va volviendo cada vez más asequible, a menudo deja de ser rentable comprar un mezclador analógico. A partir de cierto tamaño, trabajar con tecnología analógica comienza a ser algo sólo para entusiastas.
El técnico de sonido profesional que necesita muchos canales y gusta de aplicar ajustes finos en el sonido optará en la mayoría de los casos por un mezclador digital.
Sin embargo, las personas con menos conocimientos técnicos que sólo van a usar unas pocas funciones del mezclador y tienen que gestionar pocas señales, irán muy bien servidas con un mezclador analógico.
