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6. Combos de bajo

El nombre ya lo dice: Aquí se trata de la combinación de un cabezal y una caja de graves en un mismo recinto. Los recintos de los combos de bajo son en su mayoría más pequeños que en los sistemas separados, y por norma también más ligeros. Por tanto para el que tiene claro que va a necesitar mover frecuentemente su equipo, seguramente un combo podría ser una buena elección. El combo se deja transportar bien por una sola persona, y tampoco ocupa mucho sitio en el maletero del coche.

Una desventaja, no obstante, son las reservas de potencia que ofrecen los combos, que por norma general están limitadas - a menudo no ofrecen la potencia que pueden dar los cabezales.

Un musculoso italiano: Este CMD 151P de Markbass unifica mínimo peso y buenas reservas de potencia.

Usos y funciones:

Las características los combos de bajo que hemos comentado ya predestinan su uso más bien al ámbito doméstico o para bandas con una volumen general moderado, y esto marca de por sí las diferencias: Por un lado están los pequeños y compactos combos de bajo cuyo ámbito de utilización es la práctica en el hogar. Estos combos de práctica suelen contar con cifras de vatios de entre 10 y 20W. Para su ámbito de uso en principio esto sería suficiente ya que no encontramos aquí instrumentos con mayor volumen de los que haya que destacar.
Pero si con uno de estos ejemplares se intenta formar parte en el ensayo de la banda en el local, en la mayoría de los casos el intento terminará en frustración. Estos pequeños combos no pueden competir en el contexto de banda en términos de presión sonora y volumen.

Los combos de bajo capaces de desenvolverse con soltura en un local de ensayo a un volumen medio deben partir de al menos 150-200W de potencia. Aquí se puede afirmar que: ¡cuanto más mejor! (el lema: Headroom!)

Equipamiento de altavoces

No solo la potencia del amplificador es un factor importante en los combos de bajo, también lo es el altavoz que monte. Es obvio que un único altavoz de 10 pulgadas apenas puede poner suficiente viento en movimiento para acompañar a una banda. Aquí dos unidades de 10 pulgadas es una buena base, y de hecho muchos combos de bajo albergan dos altavoces de este tipo en sus recintos.
También está bien pensar en una configuración con un altavoz de 12 o de 15 pulgadas. La ventaja es que estos altavoces de por sí producen más graves que los de 10 pulgadas porque las superficies de sus membranas son capaces de mover más cantidad de aire.

Altavoces adicionales

Algunos combos de bajo permiten la conexión de un altavoz adicional, lo que definitivamente puede ser de gran ayuda para compensar el deficit de volumen. Porque más altavoces consiguen literalmente llenar la sala con „más grave“. El que tiene la posibilidad, puede por ejemplo dejar un altavoz extra en la sala de ensayo para simplemente desplazar el combo y poder seguir practicando en casa. Por tanto antes de decidirse por un modelo a la hora de la compra no está de más echar un vistazo a las posibilidades de conexión de altavoces externos.

Generalizando

El que vaya a desplazar frecuentemente su combo de bajo, debe prestar atención antes de adquirir uno nuevo a que el fabricante haya contemplado el emplazamiento de los componentes susceptibles de rotura. Es una ventaja cuando los conmutadores y potenciómetros están montados un poco encastrados, porque de esta forma es más difícil que se rompan si reciben un impacto accidentalmente por ejemplo contra la pared o el marco de la puerta.
Las asas de buena calidad con las que el recinto puede desplazarse bien equilibrado también son otro requisito importante si se quiere transportar el combo con comodidad.
Y también los altavoces deben quedar bien protegidos por una rejilla robusta que no tiemble o produzca ruidos molestos con la vibración del recinto al tocar.

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